Sufrir un golpe o accidente con el coche es una experiencia estresante y, en muchos casos, costosa. Una vez que te aseguras de que todos los ocupantes están bien, el siguiente paso es evaluar los daños y presentar una reclamación a tu compañía de seguros. Para esto, es necesario realizar una peritación de daños en el vehículo, un proceso que determinará cuánto costará reparar el coche y si merece la pena hacerlo.
En este artículo, te explicaremos cómo funciona la peritación de daños en un vehículo, qué aspectos se tienen en cuenta y cómo prepararte para que el proceso sea rápido y justo.
¿Qué es una peritación de daños en un vehículo?
La peritación de daños es un proceso de evaluación técnica que tiene como objetivo determinar el alcance de los daños sufridos por un vehículo tras un accidente. Esta evaluación es realizada por un perito que puede ser empleado de la aseguradora o un profesional independiente.
Objetivos de la peritación de daños
- Calcular el coste de reparación del vehículo.
- Determinar si el coche es reparable o debe ser declarado siniestro total.
- Verificar que los daños sean coherentes con la descripción del accidente.
- Evitar fraudes en las reclamaciones.
- Establecer el importe de la indemnización para el asegurado.
¿Cuándo es necesaria una peritación de daños en un vehículo?
La peritación es necesaria en una variedad de situaciones, incluyendo:
- Accidentes de tráfico.
- Colisiones en aparcamientos.
- Daños por vandalismo o robo.
- Fenómenos meteorológicos como granizo o inundaciones.
- Reclamaciones por responsabilidad civil.
Cómo funciona el proceso de peritación de daños
1. Notificación del siniestro
El primer paso es notificar el siniestro a tu compañía de seguros. Esto debe hacerse lo antes posible, generalmente en un plazo de 7 días desde que ocurrió el accidente o descubriste el daño.
- Consejo: proporciona toda la información posible, incluyendo fotos, testigos y un parte amistoso si es necesario.
2. Asignación del perito
Una vez que la aseguradora recibe la notificación, asignará un perito para inspeccionar el coche y evaluar los daños. Este perito puede ser interno (empleado de la aseguradora) o externo (contratado a través de una empresa independiente).
- Consejo: asegúrate de que el coche esté accesible para la inspección y limpio para facilitar el trabajo del perito.
3. Inspección del vehículo
El perito se desplazará al taller donde se encuentra el coche o a tu domicilio para realizar una inspección detallada de los daños.
- Aspectos que se inspeccionan:
- Carrocería: abolladuras, arañazos y daños estructurales.
- Cristales: roturas o grietas en el parabrisas y ventanas.
- Sistemas de seguridad: airbags, cinturones de seguridad y sistemas de asistencia a la conducción.
- Neumáticos y llantas: posibles daños en las ruedas o desalineación.
- Componentes mecánicos: posibles daños en el motor, transmisión o sistema de escape.
- Consejo: si es posible, acompaña al perito durante la inspección para asegurarte de que no se pasen por alto detalles importantes.
4. Elaboración del informe de peritación
Después de la inspección, el perito elaborará un informe detallado que incluirá:
- Descripción de los daños encontrados.
- Estimación del coste de reparación.
- Determinación de si el coche es reparable o siniestro total.
- Fotografía de los daños.
- Opinión sobre la coherencia de los daños con el accidente reportado.
5. Evaluación del siniestro total
Si el coste de reparación supera un porcentaje significativo del valor del coche (normalmente entre el 75% y el 100%), la aseguradora puede declarar el vehículo como siniestro total.
- Consecuencia: en este caso, la compañía de seguros te indemnizará con el valor venal o valor de mercado del coche, menos las posibles franquicias.
6. Aprobación y pago de la indemnización
Una vez que se emite el informe del perito, la aseguradora revisará los datos y tomará una decisión sobre la indemnización.
- Opciones posibles:
- Reparación completa: si el coche es reparable y el coste es razonable.
- Indemnización económica: si se declara siniestro total.
- Rechazo del siniestro: si los daños no están cubiertos por la póliza.
7. Segunda opinión y contraperitación
Si no estás de acuerdo con la valoración del perito, tienes derecho a solicitar una segunda opinión o contratar a tu propio perito independiente para que realice una contraperitación.
- Consejo: si decides hacer esto, revisa tu póliza para ver si cubre los costes de una contraperitación.
Consejos para una peritación exitosa
- Documenta bien los daños: toma fotos desde varios ángulos y guarda todos los documentos relacionados con el accidente.
- Coopera con el perito: responde a sus preguntas de manera precisa y honesta.
- No repares el coche antes de la peritación: esto podría invalidar tu reclamación.
- Revisa bien tu póliza: asegúrate de que los daños estén cubiertos antes de presentar la reclamación.
- Solicita una segunda opinión si es necesario: si no estás satisfecho con el informe del perito, no dudes en buscar una evaluación independiente.
¿Qué hacer si no estás de acuerdo con la peritación?
Si no estás satisfecho con el resultado de la peritación, tienes varias opciones:
- Solicitar una segunda peritación.
- Contratar a un perito independiente.
- Presentar una reclamación formal ante tu aseguradora.
- Acudir a una asociación de consumidores o al defensor del asegurado.
Las peritaciones de daños en un vehículo son un paso fundamental para asegurar que recibas una compensación justa tras un accidente. Entender cómo funciona este proceso y qué factores se tienen en cuenta puede marcar la diferencia entre una reparación rápida y una batalla legal prolongada.
Si estás preparado y bien informado, tendrás más posibilidades de obtener una indemnización justa y rápida, sin sorpresas desagradables en el camino.